Está dirigido a ayudar a las personas a resolver sus conflictos, reencontrar el equilibrio emocional, estimular el crecimiento personal, potenciar habilidades sociales y dotar de herramientas de afrontamiento. El grupo es un espacio donde ventilar los problemas de cada miembro del grupo y hallar solución a los mismos.
Es eficaz porque las personas sienten que no están solas con su problema y se rompe el aislamiento al que se habían sometido. La posibilidad de compartir sus emociones y pensamientos sin miedo a la crítica fomenta un elevado nivel de cohesión grupal que conduce a cambios psicológicos más estables a lo largo del tiempo.
Algunas personas son reacias a involucrarse en una terapia de grupo y se hacen preguntas: ¿Tendré espacio suficiente para hablar de mis problemas? ¿Los demás me escucharán? ¿Me sentiré incómodo hablando de problemas íntimos delante de extraños? Debemos pensar que las experiencias de los demás nos pueden resultar muy valiosas y que nuestras vivencias pueden ayudar a otros.
La terapia grupal es un espacio privado y confidencial donde los demás te escucharán y tú podrás escucharles en un ambiente de apoyo y comprensión. La mayoría de las personas que han participado en una terapia de grupo corroboran que ha sido una experiencia positiva y enriquecedora.
Beneficios de la terapia grupal:
Darte cuenta de tus emociones, conflictos, sentimientos, motivaciones, conductas y relaciones.
Entender tu comportamiento
Mejorar tu comprensión de los entornos sociales, apreciando otros puntos de vista o analizando el impacto de tus comportamientos en diferentes contextos.
Descubrir tu potencial y la capacidad para desarrollar nuevas respuestas y comportamientos.
Conocerte mejor a ti mismo.
Ampliar tu red de apoyo social
Reforzar tu autoestima.
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